- 29 abril, 2020
- Posted by: Equipo tatum
- Categoría: Blog
La comunicación escrita está cada vez más presente en todas las actividades del mundo empresarial. Así es que para ahorrar tiempo y mejorar nuestro desempeño debemos aprender a utilizar eficazmente la herramienta de trabajo que más horas empleamos, que es el lenguaje escrito.
Además la situación actual que estamos viviendo y el trabajo en remoto exige mucho más de esa comunicación escrita, con nuestros compañeros, clientes, jefes, etc…
También tenemos herramientas como el whatsapp, sms, correos electrónicos… que nos exigen desenvolvernos mejor con nuestra comunicación escrita y optimizar los tiempos invertidos en la misma.
Cuántas veces estás frente al ordenador elaborando o recibiendo textos… Cuántas veces has perdido tiempo frente a la pantalla porque no sabes como desarrollar una idea que va por escrito… Cuántas veces has pensado que el tono empleado en un correo electrónico iba a provocar o podía provocar malos entendidos con tu equipo o con los clientes…
Según una última investigación, el empleado promedio pasa dos horas y media por día sólo intentando lidiar con el correo electrónico. Eso equivale a la cuarta parte de nuestra vida laboral. A eso súmale presentaciones, informes, etc…
Así que llegamos a la conclusión de que escribir bien influye en una gran parte de nuestro trabajo.
Ambos tipos de comunicación pueden generar malentendidos, pero la comunicación escrita puede llevar a más errores. La comunicación escrita carece de elementos clave como:
Ver la cara de nuestro interlocutor”
Escuchar el tono del mensaje
Capacidad inmediata de preguntar o interactuar para aclarar malentendidos
Además de que, cuando genera errores, al estar presentes en un texto escrito y por tanto “imborrable” éstos pueden derivar en males mayores.
La comunicación escrita amplía la comunicación oral, ya que transmite realidades y sentimientos para que perduren en el tiempo.
El acto de escribir, por tanto, requiere mayor concentración y rigor que el acto de hablar. Y requiere:
Dominio amplio del léxico.
Dominio de las reglas gramaticales y ortográficas.
Dominio del estilo de redacción.